¿Dónde queda la Ciencia ante el “optimismismo”?
Acabo de leer un artículo en el que Noam Chomsky habla, en una interesante (o eso creo) entrevista, de los recientes avances en Inteligencia Artificial desde una perspectiva sumamente amplia y profunda en la que, de paso, hace un repaso exhaustivo de las estructuras que sostienen nuestra organización social, económica e individual.
El artículo traducido está aquí. Y el original aquí. Uno de los aspectos tratados es el de los medios de comunicación a los que dedica un interesante párrafo:
Se plantean cuestiones muy distintas cuando nos referimos a la IA y la ciencia. Aquí se impone la cautela debido a las afirmaciones exorbitantes e imprudentes, a menudo amplificadas en los medios de comunicación. Para aclarar las cuestiones, consideremos casos, algunos hipotéticos, otros reales.
En el titular menciono el término “optimismismo”. Un término que he acuñado para aludir a la creciente presencia de contenidos pseudocientíficos en los que se tratan temas de gran relevancia como la IA, la computación cuántica o la energía de fusión, entre otros, con un tono exageradamente optimista, con el ánimo de capturar clics, likes e interacciones.
Parece que el nuevo clicbait son los titulares “optimismistas”, que, por ende, dejan fuera contenidos en los que se habla, no ya de manera pesimista, sino objetiva y realista sobre el estado de desarrollo de estas y otras tendencias.
Los medios de comunicación, cada vez con más frecuencia y con pocas (y minoritarias excepciones) dejan fuera todo aquello que no sea alimentar expectativas y hacernos creer que “somos los reyes del mambo“, todopoderosos y capaces de resolver “para mañana”, cuestiones como el extraordinario impacto de la acción humana (industrial) en los equilibrios bioquímicos de la Biosfera.
Este impacto de la acción humana en dichos equilibrios bioquímicos (y termodinámicos, demográficos o biológicos) está amenazando la continuidad de dichos equilibrios, de los que dependemos como especie para poder habitar este planeta sin tener que usar un traje espacial.
